*Obra de Walkala. Luis Alfredo Duarte Herrera (1958-2010).
-En Aurora Boreal. Walkala: un homenaje in memoriam
13 *
¿Ves cómo sucede?
El sol repica entre los árboles
y las hojas
comienzan a tener un tono amarillo desvanecido
que puede clasificarse
como la búsqueda del movimiento.
Las hojas caerán
y la tierra fértil no sabrá cómo acunar
el dolor que le pertenece.
Sobre nosotros hay una pérgola con flores,
una luz apacible
que se bifurca entre tu cara y la mía.
En este paisaje lloran los condenados,
¿Ves cómo sucede la belleza?
*De Noelia Palma. noelia261984@hotmail.com
(De Luxemburgo)
-Noelia nació en Morón, provincia de
Buenos Aires, en octubre de 1984. Textos de su autoría fueron publicados en
diversas antologías y revistas digitales como Digo.palabra.txt, Letralia, entre
otras. Realizó talleres literarios con Alberto Ramponelli y Eduardo Espósito.
Su primer libro
de poemas, “Que la muerte nos ampare”, fue editado por Francia Ediciones en
2017. Tradujo a Charles Bukowski desde 2011 y en 2017 publicó junto a Editorial
Postales Japonesas su primera antología bilingüe: “Solo con todo el mundo”. En
noviembre de 2018 editó en Ombligo Cuadrado “0034-Buitre hacia la nada”, que
consta de dos libros en un solo ejemplar. En junio 2019 la editorial cordobesa
Mascarón de proa publicó “La casa”.
Mensaje*
Anoche soñé que
una mujer en la arena mojada de una playa escribía un mensaje para mí, pero una
ola lo barrió, entonces ella lo hizo otra vez y antes de terminar una nueva ola
lo barrió, alejándose más pudo finalmente completar la frase.
Después de un
largo rato contemplando el mar, la mujer de mi sueño decidió irse a dormir.
Se acostó y se
durmió profundamente y comenzó a soñar con un hombre que en la playa le
escribía un mensaje y las olas lo borraban, entonces aquel hombre se alejaba y
comenzaba otra vez hasta que pudo completar la idea, contento, sonriente, se
alejó.
En la madrugada
un viento fuerte soplo y fue de a poco borrando todo. La mujer se despertó
sobresaltada ya había amanecido, se vistió y se fue a la playa.
Pero en la
playa no había nada escrito.
En ese instante
desperté por el zumbido de un papel que flameaba en el marco de en mi ventana
que tenía escrito lo siguiente.
“No me sueñes, no me imagines, no me busques, pero
por favor, no me olvides”.
*De Mario Bernachea. nestormariobernachea@gmail.com
*
El frío me tomó por sorpresa
años saliendo
sin cuidados a la vida
yo
que podía entibiar el aire de la estación más helada
recorrí la ciudad
con mis brazos desnudos
calle negra y yo
minúscula
pasos entumecidos
y supe que no
no podría volver a casa
cinco años duró esa noche y aún
la piel en dos capas
una puntada
reverberación chocando contra el iceberg
el frío en mis ojos
grises mis mejillas
y una tristeza sin nombre en la curva de mi boca
probé con cremas
salamandras
masajes en los pies
compré mantas de lana de oveja
vestí mi casa con telares y alfombras
en pleno verano
tiritando
hasta que lágrimas
nacieron
andando los surcos de mi cara
la piel se encendió
abriéndole paso
a mi verdad
mis ojos
recuperaron su intención
el calor irrumpió
y yo
exhalé la tristeza guardada
el agua de mis poros como un río
y mi cuerpo, agua
furia
vida liberada.
*De Lorena Suez. suezlorena@gmail.com
- Lorena nació en 1975 en la Ciudad
de Buenos Aires, es Licenciada en Ciencias de la Comunicación y Psicóloga
Social.
En 2016 publicó Intemperie, su primer libro de poemas, por Viajera
Editorial. Participó en 2015 con su relato “Desde el Mandarino” de la Antología
Tetas. Historias de Pecho, por Textos Intrusos. Hace varios años es convocada
para leer en la Feria del Libro, en ciclos de poesía, programas de radio y
eventos artísticos. El 11 de agosto de 2018 publicó Mis Vendavales, su primer
libro infantil por la editorial Peces de Ciudad. Con Mis Vendavales viajó a
España y presentó el libro en diversos espacios como bibliotecas, radios y
librerías, alcanzando a un gran público infantil. Hoy, se encuentra escribiendo
un libro de ficción para adultos y dictando un taller sobre “Las emociones en
la palabra escrita”.
En
la profundidad*
Sos el amor más puro que ha
ventilado mis silencios.
Entre conversaciones largas y confesiones mutuas se hicieron
presentes olvidos y circunstancias nunca dichas, es más: sepultadas
en la profundidad.
Algunas situaciones eran muy angustiantes y por ello un cerrojo calmaba los pensamientos. Pero con
el tiempo, pude descubrir que esos escenarios influían en mi hoy, en mis
actitudes, mis inhibiciones y hasta en mi sensualidad. Esa parte tan intima de
la feminidad. Con tantos mandatos culturales y opresiones, escuchadas mil veces
en mi niñez y adolescencia.
Me has hecho reír y llorar sin tregua. Algunas lágrimas rezagaban
en salir pues dolían pegajosas, como si
la sangre saliera de mis pupilas.
Cosquilleo de carcajadas adolescentes también hicieron que hasta un
vecino quisiera espiar tal tentación.
Entre templos y piletones de agua dúctil fuimos haciendo un
recorrido de nuestra historia.
El mate la compañía indispensable.
Logramos iniciar una osada amistad, con cuerpos constreñidos por
los daños, las pausas. El sinceramiento. La voz surgía como un sainete entrecortado.
Así pasamos gratos momentos, en la profundidad de las charlas. El
río enérgico de la franqueza proliferaba
en oleadas de sentimientos auténticos.
Todavía queda mucho por decirnos.-
*De Azul. azulaki@hotmail.com
*
Me dormí
con el cuento del amor,
acunada
por la voz de las sirenas
en la orilla de mi cama.
Dulce es la voz que canta,
dulce el hilo
que teje la voz
hasta el oído del que espera
atado,
inútilmente,
a un mástil
o a su almohada.
*De Mariana Finochietto. mares.finochietto@gmail.com
- Mariana nació en General Belgrano,
Provincia de Buenos Aires. Actualmente vive en City Bell.
Publicó: Cuadernos de la breve
ceguera (La Magdalena 2014). Jardines, en coautoría con Raúl Feroglio (El Mensú, 2015)
La hija del pescador (La Magdalena, 2016). Piedras de colores
(Proyecto Hybris 2018)
Su último libro publicado es El orden del agua,
GPU Ediciones (2019)
-Coordina Microversos, talleres de exploración literaria.
Odisea*
Dos mil flores al crochet
tiene el vestido de novia de mi madre.
Nunca las conté, pero le creo.
Con los hilos
que otros apartan por las noches,
ella, durante el día, teje todos mis abrigos.
Mi madre es una Penélope
que nada aguarda,
sólo una hebra en sus manos
al amanecer
para continuar.
*De Paula Novoa. novoapaula8@gmail.com
Aquella mujer*
Alguna vez –hace siglos-
fui joven, retama florecida,
talle de pluma en el giro de un vals.
No se ha ido aquella mujer.
La he visto hoy
y estaba escribiendo...
*De Miryam Colombotto Seia. miryamseia@cablenet.com.ar
MORIR DE AMOR Y NO DE
ABISMO*
Y otra vez la luna y el espejo…
Me mira, me arrulla, me desea...
El sexo me acaricia la espalda.
Relámpagos. Cerezos. Mi amado.
Mi caballo negro que se aleja.
Cibeles o Rea o la Pacha…
Cubren la luna en morados crespones.
Los espectros andan en la calle.
Hijos contingentes de la fatalidad.
Por la calle hay frío, mucho frío.
Narciso se refleja en los charcos.
Una mujer flaca abre las piernas.
El hombre deambula por su carne.
Y se buscan, singulares, extraños.
Y se encuentran, se lamen, se nostalgian.
Se lloran. Gimen. Mueren de amor y soledad.
El hombre hunde su cara en los pechos colgantes.
Saben a uvas maduras, a preñez, a madre.
La mujer se entrega a la daga, por completo.
Sabe a madera de arrayanes. A pan. A leche.
Hay olor a moho, a pobreza, a rancio.
El hombre huele la desnudez de hembra.
Hay olor a tomillo y zarzamora.
Y mana la gruta y florece el páramo.
Es mejor morir de pobreza y no de angustia.
Y cabalgan, jadeantes, la utopía.
Y otra vez la luna y el espejo.
Principio de realidad, le llaman.
O vergüenza…temor… o cobardía.
Secretísimo dolor. Me languidece. Me postra.
Entrego mis monedas a Caronte.
Y mis ojos flotan en el lago.
Ángeles caídos danzan en mi vientre.
La muerte amamanta las babosas.
Un leproso me acaricia la boca.
Y los sátiros. Ah los sátiros.
Me tallan. Me reinscriben. Me cincelan.
Me muerden los pezones.
Me poseen, me seducen, me embrujan.
Morir de amor y no de abismo.
*De Amelia Arellano. amelia.arellano01@gmail.com
*
¿Qué espero aquí,
sentada,
como otra dulce princesa
de un mal cuento,
mientras la lluvia
se cansa
de lavar el mundo?
No habrá príncipe
que navegue
las aguas turbulentas,
ni he de quererlo
si comete la imprudencia
de venir a mí,
sumiso como un perro,
mojado como un pez.
Debería
salir bajo la lluvia,
armada
hasta los dientes de impaciencia,
reina guerrera desprovista de paraguas,
y derribar su puerta
con un grito de furia y de deseo.
Pero llueve y hace frío y está gris.
Y no encuentro mi corona
en el desorden
de la casa.
Tal vez mañana,
sí,
mejor mañana.
*De Mariana Finochietto. mares.finochietto@gmail.com
- Mariana nació en General Belgrano,
Provincia de Buenos Aires. Actualmente vive en City Bell.
Publicó: Cuadernos de la breve
ceguera (La Magdalena 2014). Jardines, en coautoría con Raúl Feroglio (El Mensú, 2015)
La hija del pescador (La Magdalena, 2016). Piedras de colores
(Proyecto Hybris 2018)
Su último libro publicado es El orden del agua,
GPU Ediciones (2019)
-Coordina Microversos, talleres de exploración literaria.
AGUA VA*
En el mar del vientre, todos somos viajeros y migrantes. Del útero
al mundo, del mundo a la tierra, vamos pasando las estaciones de elemento en
elemento. Del agua al aire, del aire al fuego, de ahí a la tierra y viceversa.
Así infinitamente. Desterrados, desuterados, con la nostalgia de un mar que nos
contuvo en la cuna, vamos por el mundo añorando raíces. Pero el agua no tiene
donde aferrarse: hay que dejarse llevar con su devaneo.
*De Esther Andradi. esther@andradi.de
(De Microcósmicas. Macedonia
Ediciones, Buenos Aires 2015, 2017)
-Esther es escritora, ha vivido y
trabajado en diferentes países. Nació en Ataliva, un pequeño pueblo de la
provincia de Santa Fe, Argentina, y en 1975 emigró al Perú, donde fue
reportera, columnista, y jefa de redacción. En 1980 viajó a Europa y se radicó
en Berlín (Occidental). En 1995 regresó a Argentina y vivió ocho años en Buenos
Aires. Desde 2003 vive y escribe en Berlín. Sueña con un túnel que conecte Buenos
Aires y Berlín, de manera que sea posible pasar rápidamente de una metrópoli a
otra. En sus textos emprende a menudo semejantes traspasos entre uno y otro
mundo, reflexiona sobre los cruces y márgenes, sobre aquello que se pierde en
la travesía. Y también lo que se gana. Publicó crónica, ensayo, poesía,
microficción, cuento y novela. Sus relatos fueron editados en numerosas
antologías y en diferentes idiomas. Sus ensayos sobre cultura, memoria y
migración se publican en diversos medios de América, España y Alemania. Tradujo
la poesía de la poeta alemana negra May Ayim al español. Editó la antología
"Vivir en otra lengua", pionera en la construcción de un espacio para
la literatura latinoamericana que se escribe fuera de las fronteras de los países
de origen. Ha sido traducida a varios idiomas, últimamente al islandés.
*
Se conocieron en un día de lluvia.
Mi padre ofreció llevarla bajo su paraguas, mi
madre acepto.
Vivieron bajo esa simbólica imagen del paraguas
protector toda su vida compartida.
Inventren
-Próxima estación:
JUAN TRONCONI.
En el recorrido del tren literario por Ferrocarril
Provincial:
CARLOS BEGUERIE. FUNKE.
LOS EUCALIPTOS. FRANCISCO A. BERRA.
ESTACIÓN
GOYENECHE. GOBERNADOR UDAONDO. LOMA VERDE.
ESTACIÓN SAMBOROMBÓN. GOBERNADOR
DE SAN JUAN RUPERTO GODOY. GOBERNADOR OBLIGADO.
ESTACIÓN DOYHENARD. ESTACIÓN
GÓMEZ DE LA VEGA. D. SÁEZ. J. R.
MORENO. EMPALME ETCHEVERRY.
ESTACIÓN ÁNGEL ETCHEVERRY.
LISANDRO OLMOS. INGENIERO VILLANUEVA. ARANA.
GOBERNADOR GARCIA.
LA PLATA.
***
En el recorrido del tren literario por Ferrocarril
Midland:
ELÍAS ROMERO.
KM. 38. MARINOS DEL
CRUCERO GENERAL BELGRANO. LIBERTAD.
MERLO GÓMEZ. RAFAEL
CASTILLO.
ISIDRO CASANOVA. JUSTO VILLEGAS.
JOSÉ INGENIEROS.
MARÍA SÁNCHEZ DE MENDEVILLE. ALDO BONZI. KM
12.
LA SALADA. INGENIERO
BUDGE. VILLA FIORITO. VILLA CARAZA.
VILLA DIAMANTE. PUENTE ALSINA. INTERCAMBIO MIDLAND.
InventivaSocial
Plaza virtual de escritura
-Para compartir escritos escribir a: inventivasocial@yahoo.com.ar
http://www.facebook.com/pages/INVENTIVA-SOCIAL/237903459602075?ref=hl